Soy: cómo te has llevado con el concepto de integración?
Yo: en cierta forma, bien, y en otra, obviamente que no.
Soy: vayamos por el lado de lo que sientes que no has podido integrar.
Yo: analizando desde el punto de vista de integrarme a un grupo, por ejemplo, todo me ha resultado más que difícil. En principio, de muy joven, estaba la cuestión de pertenecer, y de poder adaptarme e integrarme a un grupo. Pero no había forma.
Soy difícil el muchacho.
Yo: hoy día lo percibo así, un tema muy personal propio, donde la integración a un grupo no se daba porque me terminaba hastiando del propio grupo. Me resultaba perfecto al principio, conforme a mis estándares, y a medida que conocía más a la gente, me desilusionaba, y no me sentía a gusto. Y me distanciaba.
Soy: y en ese entonces, todo era de manera inconsciente, sin entrar a profundizar el por qué de estas situaciones
Yo: obviamente que no. Mirándolo hoy día, había mucho de patrón heredado. En mi familia es muy difícil pertenecer a un grupo, siempre hay algo que no gusta de alguna persona, y donde el primer acto sobre una situación así es empezar a distanciarse. Y esto estuvo en mí siempre.
Soy: has podido integrar este concepto para poder trabajarlo?
Yo: lamento decir que no. No hay forma de sentir que lo trabajo correctamente. Intento hacer nuevas cosas donde aparecen grupos nuevos de personas, y donde está esta incertidumbre si puedo o no poder trabajar el concepto de integración de mi ser para con otros, fuera de mi entorno. Por caso, comencé Astrología, hice el primer año, intenté entrar en el grupo, pero realmente, no iba conmigo. Así que primero seguí las clases, todo el año, y después decidí no seguir el siguiente año. Y no fue porque no podía hacerlo, elegí no seguir haciéndolo. Lo que había incorporado fue suficiente para este momento. Con el tema de seguir a Matías fue otra posibilidad de cruzarme con un grupo de gente afín a mis pensamientos, y cuando intenté hacer algo más que expresar cosas lindas para con Matías y trabajar en este camino, me di cuenta de que la mayoría de la gente no comulgaba con lo que yo pensaba, y al revés, yo no comulgaba con lo que esa gente hacía y pensaba. Así que tampoco pude formar parte de un grupo.
Soy: y cómo te sientes al respecto?
Yo: siento que no me resulta un peso. Es decir, soy consciente que no encajo en un grupo, pero no me siento emocionalmente desestabilizado por ello. No tengo hoy día esta cuestión de pertenecer a algún grupo por alguna cuestión de búsqueda de algo que me falta interiormente en el afuera. Entonces, es más una cuestión de expandir mis interacciones hacia otros horizontes, conociendo gente nueva, y que no significa que estoy en búsqueda de pertenecer sino de conocer. Entonces, el concepto en sí cambia, pues la integración no pasa por pertenecer a un grupo, sino por aumentar mi conocimiento e integrarlo a mi propio ser.
Soy: y allí vamos a la parte positiva del concepto, que siempre has tenido presente en tu ser.
Yo: siento que he podido integrar innumerable cantidad de temas, todos relacionados con trabajos propios, y donde tuve que aprender, comprender, para luego poder incorporarlo, de forma de poder trabajarlo mejor, hacia la búsqueda de la etapa posterior, que es trascenderlo.
Soy: y donde has sentido un progreso de tu parte
Yo: donde he sentido que he podido integrar mucho de lo que he venido a aprender, y donde hoy, en el aquí y ahora, siento que están integrados en mi ser. Desde aprender comprender el por qué no podía integrarme a un grupo, por ejemplo, hasta comprender que mi integración obedece a mi esencia, y que no tiene ningún sentido emprender alguna acción si mi esencia no lo dicta.
Soy: donde para ello, la coherencia y el equilibrio del ser son bases fundamentales para lograrlo
Invito a todos a ver el video de Matías con el tema del día
Finalmente, aliento a cada uno a entablar la conversación con su propio Soy, escuchar lo que cada uno tenemos para decirnos. Nadie más que nosotros podemos resignificar nuestro propio ser
El Arbol de la Vida - Tercer Ciclo 