Soy: cómo te llevas con tu sistema excretor?
Yo: primer impulso: con todos los sistemas me llevo bien. Cuando empiezo a pensar más detenidamente, empiezo a relacionar problemas que he tenido en mi sendero de vida, y vislumbro que mi primer pensamiento no era el correcto. Lo profundizo, y obviamente mis emociones han jugado el papel preponderante en el resultado de esos problemas. Y entiendo que en algún momento he tenido eclosiones en cada sistema de mi cuerpo, que me demostró que no estaba manejando bien las situaciones cotidianas.
Soy: y en este caso, tuviste tu momento más sensible en el 2012, con la operación de un tumor en el colon.
Yo: sin duda, ya lo hemos hablado, y fue un tema bisagra en mi sendero. Sobre todo, en aquello que respecta a la alimentación, al cuidado del cuerpo, y al cambio mental para tratar los temas cotidianos.
Soy: es bueno y recomendable poder analizar un poco desde el punto de vista de la descodificación, qué es lo que nuestro cuerpo nos expresa, para, desde esta perspectiva, poder analizar qué hacemos y cómo nos comportamos. Y en tu caso, ya enfocados en lo que has pasado, lo relacionado a los intestinos, representa lo siguiente
BLOQUEO FÍSICO: Los problemas del intestino delgado son los tumores, el cáncer, la diverticulitis, la enfermedad de Crohn y la diarrea. Los problemas del colon son el estreñimiento, la diarrea, los cólicos, la colitis, los gases intestinales, los tumores, el cáncer, los calambres, la gastroenteritis y los parásitos.
Yo: el enfoque, en mi caso, está más identificado con el intestino grueso, donde el estreñimiento, seguido de diarrea, gases intestinales, y el cáncer, aunque haya sido benigno el tumor generado, estuvieron allí presentes.
Soy: BLOQUEO EMOCIONAL: Un problema en el intestino grueso se produce en la persona que tiene dificultad para deshacerse de viejas ideas o creencias que ya no le son necesarias (estreñimiento) o que rechaza demasiado rápido los pensamientos que podrían beneficiarle (diarrea). A menudo sufre contrariedades fuertes que le resultan imposibles de digerir.
Yo: sabes que nunca me he visto de esa manera. Siento y percibo ser una persona flexible y no rígida, de primera mano. Luego, me detengo en ciertos momentos, y sobre todo reacciones sobre comentarios o acciones de otros, y allí me doy cuenta, por ejemplo, de un primer rechazo a ideas o pensamientos de otros que me podrían beneficiar. O a aceptar lo que otros dicen y verlo desde otra perspectiva. Me ocurre mucho cuando comento que soy rupturista. Que todo tiene una contra y que suelo ubicarme en la contra para responder a alguien en relación con un tema. Estoy siempre en la contra, ó casi siempre. Y ello tiene que ver con todo esto.
Soy: lo que significa que, al ponerte en contra, te aferras a tus ideas, ya sean nuevas ó viejas, y ello te trae la dificultad de deshacerte de esa creencia. No te parece?
Yo: me parece que sí. Cuando soy más contemplativo y acepto lo que me dicen, mi panza está más relajada. Cuando no lo acepto, me tensiono y lo siento muy rápido allí. Y las consecuencias son las descriptas, sin duda.
Soy: BLOQUEO MENTAL: Tu problema en los intestinos es un mensaje importante para que aprendas a nutrirte de buenos pensamientos en lugar de temores y pensamientos desvalorizantes. En tu mundo material tampoco necesitas creer en la escasez. Tienes que trabajar tu fe; tener fe en la presencia divina en ti y en el Universo que existe para ocuparse de todo lo que vive en este planeta, incluido tú. Debes dejar ir lo viejo que hay en ti para hacer lugar a lo nuevo.
Yo: un pensamiento que debo incorporar, sin duda. Trabajar mi fe, sobre todo. Considero a la fe como algo inútil. Tener fe es tener una expectativa. Me confunde, porque la fe es un concepto que lo niego en mi camino de vida.
Soy: y lo sientes como una pérdida.
Yo: así lo siento, sí. Me produce una cierta nostalgia no sentir esa sensación que genera tener fe en algo. Es como sentir un vacío.
Soy: realmente sientes que no tiene fe?
Yo: así lo siento.
Soy: pero cuando hablando de tu ser, de lo que haces, de tu esencia, de tus propósitos, no sientes esa fe y esa creencia de que allí está tu esencia, esta tu equilibrio, tu coherencia, tu armonía de vida?
Yo: sí, por supuesto.
Soy: pues eso también es tener fe, mi amigo.
Yo: cierto!
Soy: a no confundir la fe en ti mismo con la fe en otros. La fe está en ti, solo que no la buscas afuera, sino que la tienes en ti.
Yo: gran verdad!
Soy: volviendo a los intestinos, sobre todo el grueso, el colón, el enfoque está en la capacidad para soltar, dejar fluir lo que es inútil y dejar fluir los acontecimientos de la vida.
Uno de los mejores remedios para tu intestino es beber agua. No sólo afectas a tu intestino por lo que comes. Hemos visto la importancia de las emociones en las enfermedades de tu intestino. Piensa bien, siente bien y reduce el estrés en tu vida.
Yo: tomo nota.
Soy: y recuerda: eres lo que piensas, eres lo que comes. Despréndete de todo lo que no necesites, vive sin miedo y con consciencia cualquier proceso en tu vida.
Invito a todos a ver el video de Matías con el tema del día
Finalmente, aliento a cada uno a entablar la conversación con su propio Soy, escuchar lo que cada uno tenemos para decirnos. Nadie más que nosotros podemos resignificar nuestro propio ser