Soy: finalizada la lluvia, parte de esa agua circula por los arroyos
Yo: me encanta el surco que los arroyos dejan sobre la tierra que recorren, y la vegetación que florece en sus márgenes, que hace que la naturaleza se muestre en todo su esplendor
Soy: y como el recorrido que hace en la naturaleza, para desembocar sus aguas en ríos, lagos, lagunas, y mares, en tu interior esos flujos en movimiento te sirven para poder liberar mucho de lo que queda rezagado en los confines de tu interior.
Yo: toda la limpieza de lo que tenemos dentro.
Soy: y cómo anda tu limpieza propiamente dicha?
Yo: el largo trabajo de estos casi dos años en el camino del YoSoy me ha llevado a que casi te diga que las piedras sobre los arroyos que fluyen dentro de mi ser están brillantes y pulidas, jaja
Soy: exagerado y gráfico, como siempre
Yo: es para darle un poco de movimiento a la charla
Soy: y por qué piensas que ya has sacado todo lo que tenías dentro?
Yo: no percibo haya sacado todo, pero sí he podido liberar mucho. Y lo siento así porque estoy muy tranquilo y en paz con mi interior. Lo que tenía guardado en pensamiento y frustración, he podido trabajarlo, he podido comprenderlo. A su vez, mis falencias, lo que yo sentía eran falencias propias, las he podido resignificar y forman parte de mi personalidad, de mi estilo y de mi esencia. Y no son falencias. No es una debilidad. También resignifiqué el sentido de ciertas debilidades propias. Me he reconocido de la forma que soy, y lo acepto. También he resignificado el tema de poder comprender a mi entorno y verlos desde la propia perspectiva de mi interlocutor. He resignificado el poder mirar a la gente, y dejar de juzgar por cierta actitud y mirar más profundamente a cada persona, entendiendo si está bien ó no más allá de la apariencia, y esto me ha permitido sentirme más relajado en mi interacción con cada uno. Si yo estoy bien, la relación con los demás va a estar bien
Soy: en estos últimos días, percibo que estás haciendo una sinopsis de todo lo que has hecho y el progreso sientes has realizado. Te sientes en plena evolución.
Yo: cuando lo expreso, en nuestra charla, me da regocijo. Algo del centro de mi cuerpo, desde mi plexo lo siento, parece hacer una explosión de bienestar.
Soy: lo sé, yo también siento la vibración y energía.
Yo: será que estoy demasiado efusivo con decir que me brota total regocijo de mis progresos? A veces me pregunto si es bueno poder expresar cosas buenas que nos pasan. Siempre me ocurre de intentar ser mesurado con expresar lo que siento, no vaya a ser que venga una energía negativa que destruya todo lo bueno.
Soy: pero también sueles blindarte de esos flujos energéticos.
Yo: jaja. Patrón heredado de mi abuela materna. Sacar los cuervos, decía. La mala onda que se pega en el cuerpo. Qué te puedo decir? Ese patrón lo utilizo como amuleto heredado de ella. Me hace sentir protegido.
Soy: si ello te permite mantenerte en tu propio equilibrio y coherencia, no veo por qué dejar de utilizarlo. También entiendes que la energía fluye y no hay buenas ondas o malas ondas, hay energía que fluye y punto. Y así como recibes energía, debe seguir su circuito y continuar su camino. Lo que queda trunco es lo que resulta negativo para tu cuerpo, para tu equilibrio y para tu mente.
Yo: sín duda. Pero mi abuela, seguro está contenta de que la recuerde y sienta que me está protegiendo.
Soy: seguro está allí contemplando tu evolución.

Invito a todos a ver el video de Matias con el tema del día
Finalmente, aliento a cada uno a entablar la conversación con su propio Soy, escuchar lo que cada uno tenemos para decirnos. Nadie más que nosotros podemos resignificar nuestro propio ser