Soy: hablemos del tronco de este árbol de la vida, que, en su segundo año, busca estar alineado.
Yo: en equilibrio y coherencia.
Soy: sientes firmeza en tu eje? Te sientes en el equilibrio?
Yo: trato de tener una percepción equilibrada en esto. Busco el equilibrio, trabajo diariamente los conceptos y mi interior. Siempre encuentro algo que debo trabajar. No intento cambiarlo en un abrir y cerrar de ojos, pues me estaría engañando. Tengo paciencia. Intento ver si realmente he cambiado en mis acciones, y si repito los brotes emocionales que surgen, y así me doy cuenta si he incorporado el cambio o todavía no. Busco el equilibrio cada día. Pongo la intención de alinearme al eje de nuestra madre Gaia, donde vivo aquí y ahora, y brota en mi interior toda una energía que me hace sentir en equilibrio con ella.
Soy: no hay perfección en esto, lo sabes.
Yo: por supuesto. El Universo me lo demuestra en cada momento, y lo acepto. Pero esta intención de estar equilibrado me permite transitar lo que ocurre cada día de una manera más armónica. Menos exaltada. Me gusta la calma. Puedo y hago mucho en calma. No me quedo inmóvil. Es como nadar en un mar tranquilo. Me muevo continuamente y voy hacia donde tengo ganas, en vez de que la corriente me lleve.
Soy: y en ese equilibrio, cuando la corriente es fuerte, te dejas llevar y utilizas tu energía para arribar al lugar que te depare la corriente, aceptando que no es el momento de nadar en contra de ella.
Yo: exactamente. Entiendo que ese también es un equilibrio que debo tener. Y sabes qué? Este trabajo que ya lleva dos años me hace pensar que este eje cada vez es más grande, como si fuese un tronco de un árbol que cada día tiene un diámetro mayor.
Soy: por lo que cada vez se dobla menos.
Yo: algo así. Debo seguir trabajando los conceptos. Debo incorporar más conocimiento, debo ser más consciente. Tengo mucho por hacer
Soy: por supuesto. Esto es eterno.
Yo: bueh, no lo pensaba tanto…
Soy: pues tú eres eterno. Entonces, cómo no va a ser eterno el trabajo que debas realizar?
Yo: buena pregunta. Pensaba que en algún momento iba a terminar, jaja
Soy: el día que termine será porque has vuelto a tu centro, a tu origen, y no tengas nada más que incorporar. O si, pues será el inicio de todo. O de la nada.
Yo: entendido. Dejemos esa parte para cuando llegue.
Soy: obviamente que tu eje está robusteciéndose gracias al trabajo que estás realizando, a tus ancestros que te han realizado su camino para que tú estés aquí, y sobre todo, por tu padre y tu madre.
Yo: los que han permitido pueda trabajar mi eje y alinearlo en coherencia. Muy agradecido por todo lo que han hecho, y aún siguen haciendo por mí.
Soy: te apoyan, te aman incondicionalmente.
Yo: lo sé y por ello los honro y agradezco.
Soy: te sientes estar en el camino correcto.
Yo: siento estar en el camino que debo transitar.
Soy: en el camino de tu soy.
Invito a todos a ver el video de Matias con el tema del día
Finalmente, aliento a cada uno a entablar la conversación con su propio Soy, escuchar lo que cada uno tenemos para decirnos. Nadie más que nosotros podemos resignificar nuestro propio ser
El Arbol de la Vida - Tercer Ciclo 